Director: David Gordon Green
Actores: Jamie Lee Curtis, Rhian Rees, Judy Greer, Andi Matichak, Jefferson Hall, James Jude Courtney, Nick Castle, Will Patton
Guión: David Gordon Green, Danny McBride, Jeff Fradley
Productores: Malek Akkad, Bill Block, Jason Blum, John Carpenter, Jamie Lee Curtis, David Gordon Green, Rick Osako, Ryan Turek
Montaje: Timothy Alverson
Fotografía: Michael Simmonds
Música: Cody Carpenter, John Carpenter, Daniel A Davies
Producción: Blumhouse Productions, Miramax, Universal Pictures, Rough House Pictures, Trancas International Films
Tras relanzar y poner de moda el genero del slasher a finales de la década de los 70, el universo Halloween ha tenido una continuidad cuanto menos difusa (como la mayoría de las sagas de terror que triunfaron en esa época por otra parte) con secuelas directas, reboots, remakes, rarezas sin demasiada continuidad (ese Halloween III), continuaciones que ignoraban algunas de las anteriores, etc ...
El nuevo film de David Gordon Green a imitación de lo que ya hizo en su momento la poca valorada y ahora reivindicada Halloween H20 (parece que hay hacer algo así cada 20 años), olvida todas las secuelas posteriores para ser una continuación del film original 40 años después.
Pese a la distancia temporal La noche de Halloween no pierde el tiempo y se pone pronto en marcha, mostrándonos a un Michael Myers recluido en una institución mental, que oh casualidad, se fuga durante un traslado y a una Lauri Strode que lleva 40 años preparándose para ese momento.
A pesar de las suspicacias que podía originar la elección de un director sin experiencia en el género y más centrado en la comedia durante su carrera, David Gordon Green supone un agradecido aire fresco para la saga y es que pese a conservar y respetar la esencia del original, consigue modernizar esta nueva entrega adaptándola a los nuevos tiempos.
Así Michael Myers continúa siendo una máquina imparable de matar pero el film no tiene miedo a introducir toques de humor (la mayoría autorreferenciales por cierto) o de pura acción para conseguir mantener el ritmo en los momentos en que nuestro asesino enmascarado favorito no está en pantalla.
La noche de Halloween a pesar de esto sigue los cánones clásicos del slasher y si bien es cierto que el body count puede resultar algo escaso en número ofrece a cambio varios momentos de un Michael Myers completamente desatado cometiendo asesinatos deliciosamente brutales.
Enfrente el necesario salto al S.XXI del género y la lógica evolución en el papel de las protagonistas femeninas, representado aquí en tres generaciones de una misma familia, que nos llevan de la scream queen más clásica a la actual heroína de acción, papel en el que destaca una absolutamente espectacular Jamie Lee Curtis, destilando carisma como auténtica badass de la función.
La noche de Halloween es la revolución que necesitaba la saga para adaptarse a los nuevos tiempos, divertida y fresca a la vez que respetuosa con el material original, nos vuelve a traer a Michael Myers y Lauri Strode como referentes del terror al S.XXI con una película probablemente más espectacular que terrorífica. Tal vez a los más puristas no les acabe de convencer esta nueva perspectiva, pero visto su éxito entre público y crítica no queda duda que este era el giro que Halloween necesitaba para volver a resucitar una vez más para el gran público.
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