Frío en Julio

Frío en Julio. Título original: Cold in July

Director: Jim Mickle

Actores: Michael C. Hall, Sam Sephard, Don Johnson, Wyatt Rusell, Vinessa Shaw.

Guión: Nick Damici y Jim Mickle. Basado en la novela de Joe R. Lansdale.

Productores: Rene Bastian, Adam Folk, Linda Moran y Marie Savere.

Montaje: John Paul Horstmann y Jim Mickle.

Fotografía: Ryan Samul.

Música: Jeff Grace.

Producción: BSM Studio, Backup Media, Bullet Pictures y Paradise City.


Jim Mickle ya demostró en Somos lo que somos que es un director a tener muy en cuenta en los próximos años, pero ha sido con Frío en Julio dónde ha demostrado que está preparado para cotas más altas, y es que en su clasicismo y supuesta sencillez a la hora de rodar se encuentran sus principales puntos fuertes pues posee una capacidad extraordinaria para poner la cámara dónde debe y dejar que los actores y la historia se apoderen del espectador, algo a primera vista sencillo, pero que no lo es ni mucho menos.



Frío en Julio es una de esas películas a las que te debes acercar conociendo lo menos posible de su argumento, no quiere decir que no pueda ser disfrutada una vez pasada la sorpresa inicial (de hecho yo la vi dos veces en Sitges y la disfrute más la segunda vez al estar más atento a ciertas cosas que no me convencieron en un primer visionado), pero si que creo que merece la pena verse sin saber lo que te vas a encontrar, sin temor a caer en spoilers podemos decir que se trata de la historia de un amable padre de familia que se ve obligado a disparar contra un atracador que entra en su casa por la noche, a partir de aquí convertido en un héroe local se ve arrastrado a una trama de violencia y venganza cuando el padre del ladrón asesinado aparece en el pueblo con la intención de ajustar cuentas con el asesino de su hijo.

Y poco más se puede contar tras su argumento inicial porque uno de los mayores aciertos del film es la perfecta ejecución de dos giros de guión que en ningún momento ves venir y que hace que tu punto de vista sobre lo que estás viendo sobre la película y sus personajes cambie una vez tras otra. Esto unido a la ya comentada dirección austera y algo "seca" de Jim Mickle hace que Frío en Julio nos recuerde a ese cine de John Carpenter o Walter Hill que comienza siendo un thriller de venganzas en un pequeño pueblo y acaba en una especie de western crepuscular.

Pero si destacan la dirección y el guión de Mickle no lo hacen menos las actuaciones del trío protagonista, con un Michael C. Hall que se quita con rapidez la sombra de Dexter para convencernos de que es un padre de familia bonachón y pacífico, un sorprendente Don Johnson que dota al film de pequeños puntos cómicos y la auténtica estrella de la función, el maravilloso Sam Sephard (ya comenté mi predilección hacia éste actor en Mud) que se come la pantalla en cada aparición y es capaz de dotar de tremendos matices a su personaje, haciéndole pasar de cabronazo sanguinario, a hombre confundido e incluso asustado por la situación que está viviendo.

Pero no todo es perfecto en Cold in July por supuesto, algunas reacciones de sus personajes son algo difíciles de justificar (especialmente la evolución del personaje de Michael C. Hall) una vez sales de la sala y comienzas a reflexionar el film, y la historia pierde algo de fuerza tras el segundo giro de guión aunque se recupera en el estupendo climax final. Pequeños tropiezos que se perdonan por el estupendo acabado final del film y se compensan con varias escenas que quedan grabadas en la memoria (yo estoy recordando al menos dos, una en la casa de Hall con Sam Sephard como protagonista y otra cuando descubren cierto secreto oculto en unas cintas de vídeo) lo que convierte a Frío en Julio en una estupenda opción para todos los que busquen una buena historia de traición y venganzas con un guión sorprendente y bien ejecutado.

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