San Sebastián Film Festival 2018: Día 8

Última jornada en el Zinemaldia y es que como aprendí el primer año, el último día al margen de la Gala Clausura poco hay que hacer, así que mejor recoger y marchar el Sábado. Los excesos del día anterior con sesión de los motivados incluida hicieron que lo de madrugar a estas alturas ya fuera una quimera y me perdí Blind Spot, la última película a Sección Oficial, que si bien las primeras impresiones dejaban la idea de que podía ser la gran sorpresa de última hora, según han ido pasando las horas su valoración general ha ido bajando bastante, quedándose en un drama apañado más allá de la virguería técnica del plano secuencia que ocupa todo el metraje del film.

Expectación para ver A Star is Born, tanta que la sala se ha llenado por completo y algunos se han tenido que quedar fuera. La primera película de Bradley Cooper, pese a ser la cuarta vez que se cuenta la misma historia, lo tiene todo para ganar toda clase de premios. Bradley Cooper sorprende en su tarea de director y es que maneja la cámara como todo un veterano, con tanta fluidez a la hora de retratar los conciertos como mimo para mostrarnos la historia de amor, a la vez que observa el proceso de ascenso y caída de una estrella musical, tema aparte es el maravilloso cierre de película que consigue que hace que la lagrima esté a punto de saltar. Pero si algo se va a destacar por encima de todo es la espectacular actuación de una Lady Gaga que está esplendida en el apartado musical pero sobre todo tremendamente natural en el territorio dramático, una aparición estelar que raro sería que no se llevara nominación de Oscar este año.
Ha nacido una estrella evidentemente no inventa nada, pero pocas películas tan enternecedoras se han visto este año como ésta, es una preciosidad que llega al corazón.

"Uf que miedo me da esta", "Miedo ninguno, yo si me aburro me duermo" ... estos comentarios se oían antes del pase de Petra, prejuicios pueden pensar alguno, o tal vez que sabíamos dónde nos metíamos y lo que podía pasar.
Petra juega a ser una tragedia griega, a realizar una critica sesuda y mordaz al mundo del arte y se acaba quedando en una tortura hacia el espectador sin gracia ni casi sentido, con una historia carente de interés y con personajes al borde del surrealismo. El desorden cronológico por pura boutade ya ha sido el remate, risas nerviosas al final entre un público que ya no ha podido aguantar más.

Y por fin sesión de clausura con Bad Times at The El Royale, el esperado segundo film de Drew Goddard después de que su Cabin in the Woods se haya convertido en película de culto.
Bad Times at The El Royale comienza a todo trapo situándonos en un extraño hotel entre California y Nevada, en el que coinciden una serie de misteriosos personajes. El film va oscilando entre el thriller y la comedia negra con ciertos toques tarantinianos y detalles del cine de los Coen, sin embargo no posee ni los afilados diálogos del primero ni los maravillosos personajes de los segundos y deja la sensación de que la película es una gran idea que Goddard no ha sabido aprovechar. El mayor de los problemas es el de su alargadísima duración de 140 minutos que se acaban haciendo eternos para una película que pedía ritmo a gritos.
No se puede negar que entretiene, pero también que deja la impresión de falta de gancho y carisma tanto a nivel de historia como de personajes.

Y acabo el festival con una tradición ya institucionalizada, mi paso por Culinary Zinema, esta vez con The Heat: A Kitchen (R) Evolution. El documental parte de una premisa muy interesante, la de observar el machismo en el mundo de la cocina y como las mujeres han luchado para superarlo y cambiarlo. Sin embargo llega un momento en el que se pierde el rumbo y deriva en un documental genérico sobre el mundo de la cocina que me interesa mucho menos que la lucha de esas mujeres contra la cultura laboral machista del mundo de la cocina. Interesante, aunque podría haberlo sido mucho más.

Y hasta aquí este 68 San Sebastián Film Festival, con muchas películas, muchas risas y muchos pintxos. La Sección Oficial ha vuelto a tener un gran nivel, destacando un año más las películas españolas que probablemente acaparen el palmares y la sección Perlas a nivel de selección un año más ha vuelto a estar impecable, no hay ni una sola película que haya destacado que no hayamos podido ver aquí. Quizás el gran pero de este año haya sido el caos organizativo precisamente en Perlas con varios pases solapados y en salas pequeñas que ha hecho imposible compaginar algunas de las proyecciones más esperadas, aún así seguro que la organización, modelica una vez más toma nota y evita estos errores el próximo año.
Mañana se conocerá el palmares pero de momento aquí os dejo mi ranking personal (que aún cambiaré cien veces) para que me critiquéis a gusto. Hasta el año que viene.
Eskerrik Asko Donosti.