lunes, 5 de octubre de 2015

Regresión

Regresión. Título original: Regression

Director: Alejandro Amenabar

Actores: Ethan Hawke, Emma Watson, David Thewlis, Devon Bostick, Aaron Ashmore, Dale Dickey.

Guión: Alejandro Amenabar

Productores: Alejandro Amenabar, Fernando Bovaira, Christina Piovesan.

Montaje: Carolina Martínez Urbina

Fotografía: Daniel Aranyó

Música: Roque Baños

Producción: Himenóptero, Telefónica Studios, Mod Producciones, First Generation Films


Alejandro Amenabar forma parte de ese grupo de directores cuyo solo anuncio de un nuevo proyecto ya se convierte en un acontecimiento, en el caso del director de origen chileno con más razón aún y es que el lapso entre sus películas es a menudo prolongado, por ello es difícil huir de esa especie de histeria cada vez que se estrena una de sus películas, por un lado de la crítica, deseosa de subir de nuevo a los altares la nueva creación del director más popular de nuestro cine o querer excavar rápidamente la fosa del declive creativo del antiguo enfant terrible del cine español, por otro del público capaz de obviar en ésta ocasión las malísimas críticas que venían del Festival de San Sebastián y llenar las salas de cine, porque ver "la nueva de Amenabar" es ya un acontecimiento, algo que contar.

Ésta introducción aunque algo obvia no es accesoria y es que curiosamente Alejandro Amenabar ha querido explorar con Regresión algo parecido a lo sucedido con su nuevo film, para ello y situándose en los años 90 la película cuenta la historia de un pequeño pueblo en el que tras la denuncia de una joven por los presuntos abusos sexuales de su padre se descubre un caso de ritos satánicos que pone patas arriba la pequeña comunidad en la que viven y un departamento de policía que no está preparado para un caso de éste tipo.



Bajo ésta premisa el film intenta realizar un estudio del fanatismo religioso, el histerismo colectivo y la capacidad de la mente humana y no, no estoy de acuerdo con todos aquellos que intentan enterrar prematuramente a Alejandro Amenabar, ya que el director de Los Otros o Abre los ojos, sigue manteniendo su virtuosismo como realizador, como si de un mago se tratara, cuando lanza las bolas al aire nos maravilla de nuevo con su capacidad visual, logrando secuencias inspiradísimas especialmente cuanto más se acerca al terror, el film consigue mantenerte en tensión durante gran parte de su metraje gracias al acierto del director y a una estupenda fotografía de Daniel Aranyó que consiguen crear un ambiente opresivo del que nuestros personajes no pueden escapar.

El problema viene cuando nos damos cuenta que el movimiento de nuestro mago - director no es más que una distracción para esconder una carta bajo la manga y cuando el truco llega a su final todas las carencias salen a la luz, comenzando por unos protagonistas sin ningún tipo de trasfondo, sus vidas parecen comenzar cuando lo hace la película y es por ello tan difícil conectar con ellos, podemos intuir algo en ese detective cuyas obsesiones han hecho huir a su mujer de su lado, pero nada palpable para agarrarnos al personaje, al igual que sucede con Emma Watson, una chiquilla asustada con un supuesto pasado trágico del que apenas se nos da información, probablemente en éstas lagunas narrativas es donde más se eche de menos la labor de Mateo Gil al guión.
Si a ello unimos la quirúrgica precisión con la que Amenabar se acerca a la acción nos da una película tan sumamente fría que nos hace casi imposible conectar con ella.



No me voy a situar en el bando de aquellos que tachan de bodrio a Regresión, ni mucho menos, la película es correcta pero utilizando éste adjetivo del peor modo posible, es tan neutra que no destaca absolutamente en nada, ni siquiera la música del casi siempre acertado y en esta ocasión excesivamente obvio Roque Baños consigue un ápice de emoción en el film, nuestro mago realiza su truco de manera académica y cuando nos muestra la carta que había escondido nos damos cuenta de lo bien que nos había engañado, pero sin embargo no logra asombrarnos, porque para ello hace falta que nos metamos dentro de la acción, no que seamos meros espectadores desde la distancia. Alejandro Amenabar no se ha ido, ni mucho menos, pero sin duda con Regresión tampoco ha vuelto.

4 comentarios:

  1. ¡Buena entrada! No me llama mucho la verdad, pero tendré que verla para poder opinar jaja

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  2. Pues yo no es que la recomiende demasiado Isabel, pero bueno, como dices tú, nada mejor que verla para opinar jejeje
    Un saludo
    @tododesdemisofa

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  3. A pesar de estar en el bando totalmente opuesto a la mayoría (va a acabar por tener que darme vergüenza decir que me gustó y todo), después de leer tu critica no puede hacer otra cosa sino aplaudir. La mejor conclusión de lejos para resumir las sensaciones que aporta 'Regresión'.
    Un cordial saludo.

    www.cenitalynadir.es

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    1. Hombre Manu, se te echaba de menos y encima he visto que habéis publicado crítica, ahora mismo voy a leerla, a mi la película no me ha convencido pero tampoco creo que sea el bodrio que muchos dicen, me da la impresión que empieza a haber un poco de postureo en ésto de criticar a Amenabar, pese a todo, yo sigo con ganas de que siga haciendo cine, me parece un gran director, con sus tropiezos (para mi éste el más grave) como todos, y es que nadie es infalible, pero en definitiva un gran director.
      Un saludo

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