Nocturna 2015: Día 4

Cuarto día ya de Nocturna 2015 y comenzaba la aventura para los más valientes, el primer maratón con sesión golfa incluida y entrada al cine a las cinco de la tarde saliendo a las dos de la madrugada, cuatro películas seguidas para los grandes amantes del género. Nosotros solo hemos podido asistir a la segunda mitad por motivos laborales pero eso no ha impedido que siguiendo los comentarios a través de Twitter nos hayamos enterado del que parece el gran éxito del festival hasta el momento, Lizza The Fox Fairy ha gustado muchísimo, los comentarios favorables son prácticamente unánimes y si tendríamos que hacer una apuesta a día de hoy parece que es la principal candidata para llevarse el premio del público, pero aún queda mucho por ver en el festival.

Comenzábamos nuestra sesión con la presentación de Happy Face por parte de su director Marc Juve que desde el comienzo reconocía las influencias de Amblin y el cine ochentero, algo que no podría negar tras ver su obra, una aventura simpática protagonizada por un grupo de chicos que deciden adentrarse en una casa misteriosa, el corto se deja ver estupendamente y pese a la insistencia de su director en aclarar que era solo un proyecto de fin de carrera, técnicamente está muy conseguida y no se aprecian carencias en su realización, si sigue por éste camino Juve tiene una carrera interesante por delante.













En la sesión de las diez se proyectaba Exeter, la vuelta de Marcus Nispel al terror tras su descalabro con el remake de Conan, y la mayoría de nosotros llegaba a la proyección con cierto grado de desconfianza, ya que es difícil olvidar lo que el director alemán perpetró con nuestro cimerio favorito.

Sin embargo podemos decir que la vuelta de Nispel a sus orígenes es todo un acierto y la mejor manera de relanzar su decaída carrera, con una historia de lo más manida, la de un grupo de jóvenes que dan una fiesta en un lugar en el que sucedieron hechos terribles años atrás y en el que comienzan a suceder hechos extraños, el film da una vuelta de tuerca al género de lo más interesante, apostando en su primera mitad más por la comedia descerebrada llegando casi hasta la parodia que por el terror puro, gags auténticamente conseguidos y carcajadas continuas en la sala para una primera parte muy disfrutable y por que no decirlo festivalera. Una suerte de American Pie con homenajes a mitos de la Serie B como Evil Dead o BrainDead, dónde se escucha Heavy Metal y en lugar de leer el Necronomicon se buscan las instrucciones para un exorcismo en YouTube.

Sin embargo en su segunda parte el film olvida ese carácter festivo para centrarse más en una película de posesiones pura y sin decir que se convierte en una mala película si es cierto que pierde ese toque que la hacía especial y se convierte en algo más genérico rozando en ocasiones el exceso de comercialidad, a pesar de eso podemos decir que Exeter es una película de lo más recomendable para pasar un buen rato de risas y disfrutar tanto con sus chistes como con alguna de sus muertes más bestias, una auténtica sorpresa.

El buen rato pasado hizo que olvidáramos los pequeños problemas técnicos por los que existía cierta desincronización en los subtitulos en algunas partes de la película e incluso algunas frases ni siquiera aparecían traducidas, pero lamentablemente esos problemas iban a ir a más.

Comenzábamos la sesión golfa con la presentación del teaser trailer de un pequeño proyecto nacional, la película Verano Rojo, un slasher tradicional con toques muy patrios o eso intuimos ya que el volumen atronador hizo que la mayoría estuviéramos más preocupados de taparnos los oídos para que no nos reventaran los tímpanos que de prestar atención a la pantalla, y os aseguro que no es una exageración.

Para continuar el equipo de Plasma de Romero subía al escenario para presentar su cortometraje, el director reconocía desde un primer momento su carencia de medios y pedía que no fuéramos muy duros con ellos, la proyección tampoco ayudó ya que desde el principio se produjo en desfase entre el sonido y la imagen que hiciera imposible juzgar el cortometraje, hay que agradecer la valentía de Luís M. Rosales saliendo a pedir disculpas por el fallo técnico, pese a lo cual el público pidió que se terminara la proyección del corto, una especie de homenaje al Grindhouse y el Giallo en el que se nota el amor por el cine de las personas que han intervenido en él, dejemoslo ahí para no ser demasiado duros ya que todo aquel que intenta adentrarse en el mundo del cine merece un reconocimiento por su esfuerzo, aunque eso no es óbice para decir que no creo que el corto sea digno de un festival como éste.

Y llegaba el temido momento de la sesión golfa, lugar donde solo los más atrevidos aguantan ya que es un cara o cruz en el que no suele haber puntos medios o te encuentras sorpresas maravillosas o bodrios infumables, lamentablemente Headless pertenece a ésta segunda clase, un film cutre, aburrido y carente de interés, en el que por su gore y la estética del protagonista y de Skull boy se podía haber sacado algo más potente si el director tuviera claro hacia donde apostar, pero le pueden las ínfulas de auteur buscando narrar a base de ambiente insano y malrollero y no lo consigue, cansina y repetitiva, transita por caminos demasiado comunes en la explicación del trauma del asesino e incluso es incapaz de lograr su objetivo de provocar al espectador, ya que cuando ves por tercera vez como se folla un cráneo o se come unos ojos ya ha perdido toda su capacidad de impacto, hasta el momento la gran decepción del festival que hace buena a Indigenous y creo que eso ya lo dice todo.

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