Aunque de pena ya se ha terminado Nocturna, queda el día de mañana (ya hoy dentro de unas escasas horas) con el pequeño postre del Domingo pero lo que es el grueso del festival ya ha quedado atrás, con un último día de lo más accidentado a nivel técnico, con quizás el peor nivel de películas de toda la semana y con palmares y entrega de premios en la gala de clausura.
Comenzábamos la tarde con Oscillation, el ganador en la sección de cortos universitarios, con la historia de una joven que trabaja en una tienda de lamparas a la que comienzan a sucederle cosas extrañas, como ejercicio de estilo puede ser interesante porque a Didac Jimeno sin duda se le notan hechuras para manejar la cámara, como cortometraje ya es otro cantar, demasiado sensorial para mi gusto no comparto la decisión del jurado de éste premio.
Tras esto la primera película de la tarde era Terminus, un film australiano de ciencia ficción en el que la caída de un objeto extraño del cielo provocará una serie de sucesos extraños a David y su familia. Sinceramente no se me ocurre ninguna manera de salvar a ésta película, aburrida, sin ritmo, soporífera o maniquea podrían ser algunos de los adjetivos para definirla, un conjunto de estereotipos (desde el veterano de guerra torturado, hasta el marido que no ha superado la muerte de su esposa) que se unen a un mensaje pacifista/bíblico en el que los humanos son los principales males de todo lo que sucede en la tierra, no hay mal que cien años dure dicen en un momento del film, pues a nosotros nos ha parecido que la película duraba un par de siglos, no puedo negar que di un par de cabezadas ante semejante despropósito, pero aún así me dio tiempo a ver varias deserciones de la sala por aburrimiento extremo.
Tras esto llego el gran error del día, y es que en vez de ir a lo seguro y volver a disfrutar en pantalla grande de El Día de la Bestia con la presencia de Alex de la Iglesia decidí arriesgar con algo nuevo, ya que las aventuras del padre Berriatua son de obligado visionado para mi como mínimo una vez al año, opte por algo diferente y me aventure hacia la sala 2, ENORME error.
Para empezar vimos Chromosoma 4, entre fallos en la inserción de subtitulos, cortes en la proyección y fallos de ortografía garrafales en la traducción reconozco que me despiste un poco por lo que no quiero juzgar al corto tan a la ligera, la idea parecía interesante, será cuestión de verlo en mejores condiciones.
Tras el desastre anterior prometo que me contentaba con muy poca cosa, solo esperaba de BackCountry un buen Survivor con oso acosando a pareja de incautos que se adentran en el bosque más allá de donde deben, pero según pasaban los minutos parecía que la historia de la pareja se iba alargando, bueno será para crear lazos con los personajes, aunque seguían cayéndome como el culo, especialmente él, anda si por ahí aparece Eric Balfour, seguro que tiene alguna importancia en la historia luego, ah no que desaparece, cobra su cheque y aquí todos tan amigos, bueno toda ésta espera será para ambientar la acción, sin embargo aquí no hay tensión ninguna. En serio, llamar a ésto Survivor me parece una broma de mal gusto, por no hablar de la frase publicitaria del cartel que la compara con Tiburón, y no, no es que no pueda disfrutar de éste tipo de films porque Open Water me encanta por poner un ejemplo, pero es que BackCountry se encuentra a años luz de ésta en garra y tensión. Si juntas el vídeo de tu última excursión por el campo, con cuatro secuencias de National Geographic y te agencias la cabeza de un oso (joder la escena del ataque no podía ser más cutre) de cualquier feria de pueblo ya tienes BackCountry, ay querido Cavan con lo bien que lo podíamos haber pasado.
En fin, una vez soltada la bilis ante semejante desproposito, llegaba el momento de la clausura para la que nos poníamos nuestras mejores galas, al ya citado palmares que se dió a conocer ésta mañana se unían los premios del público para los cortos Derniere Formalite y The Fisherman y en categoría largometraje para It Follows (merecidísimo en mi opinión).
Tras una gala rápida y sencilla llegaba el plato fuerte de la jornada con Big Game, la nueva película de Jalmari Helander, el director de Rare Exports que prometía un film de acción desenfadada con el único objetivo de entretener al público.
Tras todo lo sucedido anteriormente como comprenderéis practicamente me valía cualquier película que fuera capaz de mantenerme mínimamente entretenido durante hora y media, pero los pequeños problemas técnicos que ha habido durante todo el festival aquí se hacían enormes hasta el punto de cortar la película a la media hora sin que pudieran reiniciarla de nuevo por un error en el material enviado por la distribuidora, una pena por la imagen final que deja cuando a pesar de sus fallos creo que la organización ha estado a un gran nivel, sobre la película poco se puede decir según lo visto, ni aburría ni había mostrado nada demasiado interesante, el humor de la pareja que formaban Samuel L Jackson con el niño y algunas escenas de acción vistas en el tráiler tenían pinta de ser lo más interesante pero nos hemos quedado sin saberlo.
Así que con una ligera decepción salimos a tomar aire y a pensar en disfrutar en el plato final de tan aciago día, la proyección de la película sorpresa del festival, la incombustible Re-Animator con motivo de su 30 aniversario.
Pero como cuando el día sale gafado no hay nada que se pueda hacer para evitarlo, Re-Animator ya comenzó con malos augurios, con la versión en castellano de la película y los rótulos del menú del Blu Ray a la vista, para cortarse a los pocos minutos de empezar, pese a los sucesivos intentos por recuperar la película todo pintaba a desastre, con salida de Luis Rosales incluida a pedir disculpas con un cabreo monumental, pero el espíritu de la sesión golfa había poseído al público y mal rollo ninguno, todo lo contrario, el cachondeo comenzó coreando los diálogos que ya nos sabíamos de memoria por los repetidos comienzos de la película, así el "Deprisa, deprisa Doctor Gruber" se convirtió en el lema de la noche, hasta que por suerte y con algo de retraso se pudo ver la obra de Stuart Gordon, y como ya he dicho con el resto de clásicos proyectados, es todo un lujazo poder ver éstas joyas en pantalla grande, la historia de Herbert West, el doctor obsesionado con revivir a los muertos sigue impactando y causando carcajadas a partes iguales, en una de las obras maestras de la serie B y el terror ochentero que vuelvo a disfrutar cada vez que veo, así que curiosamente lo que había sido un día horroroso hasta bien entrada la noche acabó de la mejor manera posible con una sonrisa de oreja a oreja ya no solo por la película, si no por el buen rollo creado entre todos los asistentes a la sala, y es que en el fondo por cosas como éstas es por la que seguimos asistiendo a Nocturna.
- Nocturna 2015: Día 1
- Nocturna 2015: Día 2
- Nocturna 2015: It Follows
- Nocturna 2015: Día 4
- Nocturna 2015: Día 5
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