Espías

Espías. Título original: Spy

Director: Paul Feig

Actores: Melissa McCarthy, Jason Statham, Jude Law, Rose Byrne, Miranda Hart, Jessica Chaffin, Peter Serafinowicz.

Guión: Paul Feig

Productores: Paul Feig, Peter Chernin, Jessie Henderson y Jenno Topping

Montaje: Brent White, Mellissa Bretherton

Fotografía: Robert D. Yeoman

Música: Theodore Shapiro

Producción: Twentieth Century Fox, Chernin Entertainment y Feigco Entertainment


Si algo no se puede negar de Espías es que es totalmente sincera con el espectador ya que desde un principio muestra sus cartas, comedia de humor grueso y descarado con toques de acción, recuperando el espíritu del cine paródico de los ochenta, luego ya puedes entrar en que te guste más o menos, que te parezca que lo hacen con más o menos acierto pero está claro que nadie puede sentirse engañado con lo que va a ver.

En plena dirección de la nueva versión (femenina) de los Cazafantasmas, Paul Feig está ahora en boca de todos, pero el director estadounidense lleva muchos años formándose en las mejores comedias televisivas de los últimos tiempos como 30 Rock, Arrested Development, Parks and Recreation, Weeds o The Office. Es normal por tanto que desde La boda de mi mejor amiga, su primer gran bombazo, haya seguido confiando en la prolífica cantera de cómicas de Saturday Night Live. Y es que ese es otro de los grandes puntos de identidad de Feig, el de apostar por darle protagonismo a la mujer en un género en el que se la tenía bastante olvidado como la comedia.

Espías es la definición pura de parodia cómica y es que en éste film nada ni nadie se toma en serio, ni la acción ni los personajes son creíbles desde ningún punto de vista, ni falta que hace, cada actor está en su punto y la acción y el entretenimiento nunca decae, verdadero objetivo de Feig que encadena un gag tras otro con mayor o menor acierto pero sin bajar el ritmo en ningún momento, desde los más puramente físico a la interminable y graciosisima verborrea de Melissa McCarthy, digna heredera del stand up comedy o Jude Law parodiando su propia imagen de galán inglés y eterno aspirante a James Bond.
Pero sin duda los más destacados son el maravilloso trío de secundarios, con el escatológico y pasadísimo de vueltas Peter Serafinowicz, la patosa pero a la vez adorable Miranda Hart y sobre todo un sorprendente Jason Statham, riéndose absolutamente de toda su carrera, desde su exageradísimo acento inglés hasta sus extremos papeles de acción, creando junto a McCarthy duelos verbales que suponen momentos de auténtica carcajada y que harán las delicias de todos los amantes de los Chuck Norris Facts que tanto abundan por Internet.

La historia de Susan Cooper, una analista de la CIA que acostumbrada a ser el apoyo táctico de Bradley Fine, galán y espía del que está no demasiado secretamente enamorada y cuya desaparición obliga a Cooper a salir del sótano en el que se esconde para pasar a la acción de campo es la excusa argumental para dar comienzo a la diversión.
Espías probablemente sea la comedia más convencional e incluso previsible de Feig, y puede que como película de acción no supere la media y es que precisamente si hubiera que ponerle algún pero sería algo más de trabajo en sus escenas de acción que apenas rozan el aprobado, pero sin duda todo ello se perdona por la gracia y ternura que desprende Melissa McCarthy y todos sus interpretes en conjunto. Un entretenimiento ligero, ingenuo y superficial que no busca ser más que eso, un divertimento veraniego de lo más simpático y sin duda que lo consigue.

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