Por suerte para comenzar la mañana y vencer ese cansancio que comentaba estaba programada "Relatos Salvajes" que venía precedida por muy buenas críticas desde el Festival de San Sebastián, y efectivamente podemos corroborarlo ya que estamos ante una estupenda comedia negra. Dividida en pequeñas historias como suele pasar con éste tipo de películas episódicas algunos de los relatos sobresalen sobre otros pero el tono general es más que notable. Precedida por una estupenda introducción que más que una historia más es una especie de sketch introductorio "Relatos Salvajes" nos lleva desde la violencia más física a la mala leche y el cinismo más absoluta, examinando la condición humana ante situaciones extremas en las que sale a relucir el ya famoso "el hombre es un lobo para el hombre". Sobre el buen tono medio sobresalen dos historias aupadas por dos grandes interpretaciones, esa frenética boda en la que Erica Rivas pasa por todo tipo de estados de ánimo y cuando se viene arriba se mete a los espectadores en el bolsillo y la historia del siempre solvente Ricardo Darín que ha conseguido la identificación del público en su lucha contra el sistema. En la siguiente cola tras la película todos nos confesábamos muy fans del bombita.
A continuación plato fuerte y arriesgado del festival, y es que Takashi Miike nunca deja indiferente, a un realizador tan extremo lo amas o lo odias y en ésta ocasión ha vuelto a pasar lo mismo, acaloradas discusiones a la salida y gritos de "obra maestra" y "puta mierda" enfrentados. Pese a todo lo dicho en un primer momento "Over your Dead Body" es la obra de Miike que me ha dejado más frío. La historia de una compañía teatral que mientras ensaya una nueva obra ve como la su vida real se mezcla con la ficción de la obra e incluso los sueños componen una obra si no compleja si de lenta digestión, con un ritmo muy pausado y que no sorprende por su argumento ya visto varias veces, si no por la habitual atmósfera insana de Miike. Cuando he salido de la sala tenía una peor opinión pero reconozco que la película ha ido creciendo en mi cabeza con el paso de las horas y cada vez le voy sacando más cosillas, probablemente porque sea un film que será mejor revisionar en otras condiciones, con la cabeza más despejada y más horas de sueño encima.
Para acabar la mañana "El Ardor" supone un western selvático ambientado en el Amazonas en el que Gael García Bernal es una especie de espiritu protector de los dueños de una granja en medio de la selva que quiere ser expropiada por los típicos empresarios maleantes de turno. Si bien el argumento está algo manido la realización del film es correcta para lo cual ayuda enormemente esos bellísimos planos de la selva, pero la enorme falta de garra tanto en los intérpretes como en el desarrollo y resolución de la historia lastra enormemente el conjunto, hasta quedarse en un estado intermedio cercano a la indiferencia que ni se puede calificar como bodrio ni creo que nadie vuelva a recordar después de haberla visto. Como apunte tradicional habría que decir que probablemente no sea lo más indicado vender ésta película continuamente con aquello de "un antológico climax final", porque el espectador desde el comienzo está esperándolo sin permitir ningún elemento de sorpresa y cuando realmente el final de antológico no tiene nada (en un western era evidente como iba a acabar el asunto), correcto y poco más, como el resto de la película.
Tras estas películas se presentaba un acto de Zeta Cinema para anunciar sus próximos proyectos, pero sinceramente necesitaba algo de playa y descanso por lo que he decidido no ir, eso si, por Twitter me he enterado que además de mostrar fragmentos de "Mortadelo y Filemón contra Jimmy el Cachondo" y hablar sobre otra de sus producciones "Anacleto: Agente Secreto" se ha anunciado (atención, atención) el proyecto de "Superlopez", algo que tengo muchísimas ganas de ver y es que creo que es un personaje con muchísimo potencial para triunfar en la gran pantalla si se hace bien.
Por último la tarde de Sitges se engalanaba para recibir a Antonio Banderas que recogía el premio honorífico por su carrera además de presentar "Automata". Resultaba bastante curiosa la escena en la que se veía bastante más gente esperando para fotografíar a los actores que esperando para entrar a ver la película, con la llegada de Banderas se ha producido un follón enorme lo que ha provocado el retraso de la película. A pesar de lo anterior la gente después ha entrado en la sala que estaba absolutamente llena y dónde se han vivido incluso carreras y griterío para conseguir sitio.
El actor malagueño, simpático como siempre ha agradecido el premio, dedicándoselo a Yolanda Jiménez Polonio y ha dejado una frase para el recuerdo: "Lo más de ciencia ficción que he hecho ha sido mi propia vida".
Y tras esto se ha podido ver Automata, película que ya venía con unas críticas bastante tibias por no decir negativas de San Sebastián, pese a lo cual tenía ilusión por verla ya que soy ferviente admirador de la ciencia ficción y defensor de todos los intentos de nuestro cine por acercarse a éste complicado género. Pese a mi interés inicial he de reconocer que la película de Gabe Ibañez es floja y ello se debe principalmente a su guión que sobrepasa con mucho el límite de inspirado en ... para convertirse en una mezcla de ideas ya vistas mil veces por cualquier mínimo aficionado al género, un libreto que tampoco sabe profundizar en ninguno de sus personajes, alguno de ellos apenas levemente esbozados (que manera de desaprovechar al gran Robert Forster) y con un Antonio Banderas que realiza una interpretración completamente fría y hermética, muy lejos de lo que le pedía un personaje como Jacq Vaucan con el que nunca llegamos a sufrir ni a identificarnos. Buscándole el apartado positivo la película cuenta con una estupenda fotografía que refleja muy bien ese futuro apocalíptico de ciudades sucias y cargadas (alguien dijo Blade Runner, ejem, ejem) e interminables desiertos y también con una cuidádisima labor artística y visual, pese a ese discutible "perro" robótico final.
Una lástima y sensación de enorme oportunidad perdida porque una vez conseguido lo más dificil que es ofrecer un aspecto visual tan destacado con poco dinero la película se desmorona por completo debido a un guión tan flojo.
Mañana a madrugar un poquito más para ver It Follows a la que en Sundance comparaban con los films de Carpenter (arriesgada afirmación), después The Rover, western que parece que saca al mejor Robert Pattinson, The Signal, con hacker y conspiración incluida y para acabar la mañana When Animals Dream. Me quedó con ganas de ver What We Do in the Shadows que pinta divertida pero no me veo con fuerzas, si estas me responden si que intentaré ir por la noche a Brigadoon a ver el primer capítulo de Fargo, serie de la que tan bien hablan y aún no he podido ver.
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