Creadores: Marco Ramirez, Douglas Petrie
Actores: Charlie Cox, Krysten Rytter, Mike Colter, Finn Jones, Rosario Dawson, Sigourney Weaver, Elodie Yung, Scott Glenn
Productores: Evan Perazzo, Drew Goddard, Stan Lee, Marco Ramirez, Douglas Petrie, Keira Morrisette
Música: John Paesano
Producción: Marvel, Netflix, ABC Studios, Walt Disney Television
Temporadas: 1
Capítulos: 8
Canal de emisión: Netflix
Es difícil evitar pensar que el proyecto de Marvel y Netflix llega a la esperada reunión de sus héroes urbanos en una clara cuesta abajo. Después de que la primera temporada de Daredevil nos sorprendiera y maravillara a la vez, siendo en mi opinión la mejor traslación de cualquier héroe Marvel a la pequeña o gran pantalla, la calidad de sus productos ha ido claramente a menos hasta llegar a la mediocre Iron Fist, por lo que las dudas de lo que nos podía ofrecer The Defenders estaban más que justificadas.
Hay que reconocer también que Marvel ha sabido reconocer sus errores o escuchar la crítica de sus fans (vamos a pensar que ha sido lo primero) y ha optado por reducir el número de capítulos por temporada, en vista de que en prácticamente todas sus producciones existía cierta sensación de alargamiento innecesario y de capítulos prescindibles. Sin embargo esto también se viene abajo cuando observamos que de sus ocho capítulos, los tres primeros son redundantes con la presentación de unos personajes ya conocidos con sus series propias (algunos de ellos con dos temporadas), en una búsqueda clara de nuevos espectadores que no hayan visto lo anterior. Si somos magnánimos podemos perdonárselo en un principio por la curiosidad de ver como cada vez que aparece un personaje el estilo visual cambia adaptándose a su serie matriz, con paleta de colores y música incluidos.
Tras un tercer capítulo que acaba con un final vibrante con la ya recurrente pelea de pasillo, llega el cuarto "Royal Dragon", con los héroes ya reunidos y los diálogos, la acción, la trama, todo aumenta de nivel exponencialmente en el mejor capítulo de largo de la serie y pensamos que esto por fin ha arrancado. Sin embargo nos es más que un espejismo y rápidamente volvemos a la realidad, dónde Elektra es un ENORME error tanto como personaje como de casting, el carisma y la presencia de Sigourney Weaver no es suficiente para sostener a un persona vacío de significado y que La Mano nunca ha tenido entidad suficiente como amenaza y acaba rozando casi el ridículo.
El capítulo seis intenta dar una vuelta a la serie con un giro sorprendente pero a estas alturas ya es imposible y lo único que podemos hacer es dejarnos llevar en unos dos últimos capítulos que más allá de proporcionar un clímax a la serie acaban haciéndose lentos y aburridos, llegando al culmen en una de sus escenas finales, una batalla en la que los cuatro héroes luchan juntos en una especie de cueva, dónde el guión es absurdo, las coreografías de las peleas bochornosas y asistimos a uno de los peores montajes e implementación de música (si, todos sabéis que me refiero al momento hip hop) de la historia de la televisión, en serio que no estoy exagerando.
Aunque mirándolo por el lado positivo, no hay mal que por bien no venga, y es que este fracaso con The Defenders, a la vez deja bastantes cosas claras a Marvel / Netflix si quieren continuar su camino, por una parte que siendo Iron Fist claramente el eslabón más débil de la cadena, mejora considerablemente cuando no tiene que llevar el protagonismo absoluto, algo parecido sucede con Luke Cage, que tanto en su intervención como secundario en Jessica Jones como aquí brilla más que de manera individual, por lo que una serie conjunta de ambos personajes a lo Héroes de alquiler podría ser una buena solución para ambos. Por otra parte se confirma que Jessica Jones es el personaje más desaprovechado de éste universo, su tono noir y su figura de antihéroe encarnada a la perfección por Krysten Rytter aún no han encontrado una historia a la altura, así que la búsqueda de un guión apropiado debería ser la misión principal en la segunda temporada.
Por último ha quedado claro que Daredevil destaca por encima de todos cuando es un héroe atormentado que lucha contra un villano tan complejo moralmente como él, de ahí la brillantez de su primera temporada con el insuperable Kingpin y de la mitad de la segunda cuando se enfrento a Punisher, y el bajón del final de segunda temporada con la olvidable Elektra, por lo que habrá que tener esperanzas ya que el final de The Defenders nos deja a las puertas de uno de los arcos argumentales más interesantes de la historia del hombre sin miedo.
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