Josep
Director: Aurel
Actores: (Voces de) Sergi López, Xavier Serrano, David Marsais, Bruno Solo, Silvia Pérez Cruz
Guión: Jean Louis Milesi
Productores: Jordi B. Oliva, Serge Lalou
Montaje: Thomas Belair
Dirección de arte: Aurel
Música: Silvia Pérez Cruz
Producción: Les Films d'Ici Mediterranee, Imagic Telecom
Si afortunadamente ya hace bastantes años que se han perdido los prejuicios contra la animación para contar cualquier tipo de historia, el género además se ha revelado en los últimos años en una excelente herramienta a la hora de hablar de política. Tal vez el pistoletazo de salida a nivel popular (por aquello de ganar el Oscar) lo dio la estupenda e impactante Vals con Bashir de Ari Folman, pero un año antes Persépolis ya había conseguido el premio del jurado en Cannes, incluso si queremos retrotraernos aún más nos daríamos cuenta que la animación siempre ha tratado temas políticos aunque no lo tuviéramos tan presente, de hecho este mismo año en Annecy se ha podido ver True North película que denuncia la situación en los campos de concentración norcoreanos y con similitudes tangenciales con la película de la que vamos a hablar.
La difícil situación de la animación en España hace que nos hayamos sumado tarde a esta corriente, pero ejemplos como Black is Beltza o Un día más con vida nos demuestran el potencial del género en nuestro país.
Josep basada en la vida del pintor y dibujante Josep Bartolí tiene la difícil tarea de enfrentarse a dos prejuicios iniciales, en primer lugar el ya citado de la utilización de la animación para hablar de temas políticos o sociales y más allá de eso la rancia crítica habitual de cierto sector del público patrio sobre las películas respecto a algunas partes de nuestra historia.
Sin embargo el film de Aurel supera sin dificultad ambos obstáculos y es que desde el principio observamos que esa animación basada en el estilo del propio Bartoli es sin duda la perfecta herramienta para narrar una historia que apela constantemente a la visión distorsionada de la memoria de sus protagonistas de un periodo tan salvaje y vergonzoso que solo puede ser recordado con cierto punto de falta de realidad. La otra gran sorpresa y a la vez acierto del film, es mostrarnos un punto de vista distinto al habitual, en este caso el francés que observa con vergüenza aterradora el trato que se le dio a los exiliados republicanos españoles en los campos de concentración franceses.
Con las voces de Sergi López, Bruno Solo y Silvia Pérez Cruz, quién además compone la banda sonora e interpreta el tema principal del film, Josep se convierte en un retrato humanista y aterrador, el de un preso que huye de la barbarie para encontrarse de nuevo con la crueldad y aún así no deja de luchar para no perder su humanidad, pero también el de un hombre bueno que pudiéndose ver arrastrado por las circunstancias del barbarismo lucha por hacer lo que está bien.
Ese contraste de Serge y Josep, son los que dan sentido al film, una historia durísima pero también con cierta luz, porque no todos podemos ser republicanos exiliados que lucharon contra el franquismo, pero si podemos elegir ser buenas personas.
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