La estafa. Título original: Bad Education
Director: Cory Finley
Actores: Hugh Jackman Allison Janney, Geraldine Viswanathan, Alex Wolff, Rafael Casal, Ray Romano
Guión: Mike Makowsky (Basado en el artículo periodístico de Robert Kolker)
Productores: Mike Makowsky, Julia Lebedev, Oren Moverman, Eddie Vaisman
Montaje: Louise Ford
Fotografía: Lyle Vincent
Música: Michael Abels
Producción: HBO Films, Automatik, Sight Unseen, Slater Hall
Hace algunos años que las películas basadas en hechos reales se han convertido no solo en un género propio, si no en uno de los más potentes de la industria actual, denostadas anteriormente a la categoría de telefilm en el sentido más peyorativo de la palabra, en la actualidad este tipo de films acumulan títulos de culto.
Y a esta corriente quiere sumarse el nuevo estreno de HBO, intentando ser uno de los primeros títulos potentes de esta extraña temporada cinematográfica, con dos estrellas como Hugh Jackman y Allison Janney. La estafa narra el escándalo del superintendente del instituto Roslyn, quién a la vez que llevaba a la escuela a los más altos niveles académicos malversaba más de 11 millones de dolares.
La película desde el principio apuesta por el retrato de sus dos protagonistas, unos magníficos Hugh Jackman y Allison Janney, intentando dar contexto a sus personajes más allá de sus acciones delictivas (especialmente el primero), acercándose más entonces al biopic que a la reconstrucción del delito.
La dirección de Cory Finley es elegante y clásica, con cierto toque cómico subyacente pero sin estridencias, Jackman y Janney se dejan la piel en dotar de profundidad a sus personajes y sin embargo algo falla en La estafa y es que su decisión de dilatar la acción hace que todo el interés de la cinta quede en manos de personajes que realmente no tienen demasiado que aportar más allá de su malversación. Así el ascenso y caída de ese superintendente de estrella académica a personaje repudiado por su propia comunidad poco acaba importándonos por mucho que se esfuerce Jackman.
Y es evidente que esa decisión es intencionada, ya que por la investigación de la estudiante que desencadenó el escándalo se pasa de puntillas sin dotarlo de ningún momento de emoción o intriga, haciendo que cada descubrimiento sea rutinario y falto de punch dramático.
En definitiva La estafa es una película bien dirigida y con interpretaciones esforzadas, absolutamente digna del nivel de calidad HBO a nivel técnico pero cuyas decisiones narrativas acaban convirtiendo su historia en simple, plana y carente de interés.
¿Agradable de ver?, si, ¿olvidable?, a los quince minutos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario