miércoles, 29 de abril de 2015

Daredevil: Temporada 1

Daredevil

Creador: Drew Goddard.

Actores: Charlie Cox, Deborah Ann Woll, Vincent D'Onofrio, Elden Henson, Toby Leonard Moore, Vondie Curtis Hall, Ayelet Zurer.

Productores: Alex Shevchenko y Kati Johnston.

Música: John Paesano.

Producción: ABC Studios, DeKnight Productions, Goddard Textiles, Marvel Entertainment y Walt Disney Company.

Temporadas: 1

Episodios: 13

Canal de emisión: Netflix


Cuando parecía que ya lo habíamos visto todo en el terreno de la conversión de los superheroes a la pantalla, de nuevo Marvel nos ha sorprendido, y es que si bien la trilogía del Batman de Nolan ya había demostrado que se le podía dar trasfondo y profundidad a un héroe, el Daredevil de Drew Goddard aprovecha las posibilidades que ofrece el formato serie para lograr algo diferente de todo lo visto hasta ahora.

Y es que varias han sido las circunstancias que se han dado para que Daredevil se haya convertido en la mejor adaptación (si, habéis leído bien) hasta ahora de Marvel a la pantalla. Si Iron Man fue la pionera en la gran pantalla, que nos convenció de que la espectacularidad de un cómic se podía trasladar al cine, sentando las bases de ese género hasta el momento, Daredevil marcará un antes y un después en las series de televisión de superhéroes, ya no nos conformaremos con Guilty Pleasures como Arrow, The Flash o Agents of Shield, porque ahora sabemos que algo más es posible.

La primera de estas circunstancias ha sido la fortuna de que ésta serie haya caído en Netflix, por un lado su filosofía de canal de pago ha permitido escapar del temido "para todos los públicos" en una serie que pedía a gritos algo más adulto, oscuro e incluso sangriento y por otro porque gracias a su modo de emisión en que se distribuyen los 13 capítulos a la vez, los creadores no se han visto hipotecados por la necesidad de ir enganchando al espectador capítulo a capítulo con cliffhangers o revelaciones sorprendentes si no que han buscado más una unidad y coherencia en toda la serie. Así nos encontramos con una auténtica historia de origen de un superheroe, desde el primer episodio en que descubrimos al hombre de negro enmascarado hasta el último en el que ya vemos a Daredevil tanto el personaje como la serie van avanzando poco a poco de la oscuridad y los combates más sucios y descarnados, hacia algo más de luz y estilización, existe un gran cambio entre el ya famoso plano secuencia del segundo capítulo lleno de rabia incontrolable perfectamente expresada incluso con acciones fuera de cámara hasta la última pelea ya con una coreografía más depurada y "limpia", la evolución no solo se da en nuestro héroe si no en todo lo que le rodea, caminando desde el drama, hasta el fantástico.



En segundo lugar, la decisión de su creador de trascender el género de superheroes. Ésta es en mi opinión la característica que hace algunas películas (o series en éste caso) destacar sobre otras dentro del sello Marvel y las convierten en mis favoritas, igual que ocurrió con Capitán América: El Soldado de invierno en el terreno del thriller de espionaje o Guardianes de la Galaxia en el cine de aventuras familiar, Daredevil busca ir más allá de ser "solo una serie de superhéroes" y abraza el drama como su característica principal durante la mayoría de su metraje, así vemos gran cantidad de capítulos en las que nuestro héroe enmascarado apenas aparece y son los conflictos personales de nuestros protagonistas los que hacen avanzar la trama. Drew Goddard aprovecha el medio en el que se encuentra para ofrecernos un soplo de aire fresco con una serie evidentemente para adultos de una violencia totalmente explícita totalmente novedosa respecto a lo ofrecido hasta ahora en el género, además el excepcional uso de los flashbacks (especialmente notable es toda la historia del padre de Matt) data de personalidad a nuestros protagonistas y los convierte en seres tridimensionales con motivaciones y demonios internos. Si bien Charlie Cox se convierte en el perfecto Daredevil destaca aún más en su papel de Matt Murdock, un personaje continuamente torturado y con dudas respecto a su misión debido a su complicada relación con el catolicismo, algo que tiene mucha importancia en el cómic.



Pero si hay algo que destaca por encima de todo, y por eso lo he querido dejar para el final, es la creación de Wilson Fisk, indudablemente el mejor villano (a miles de kilómetros de distancia del siguiente) que hemos visto hasta ahora de Marvel en la pantalla. Es tal el mimo con el que se trata al personaje que en muchos momentos el espectador se ve como un ciudadano más de Hell's Kitchen dudando sobre su maldad, nunca hemos comprendido y compadecido tanto a un adversario del héroe como a Fisk tras ver el capítulo en que se cuenta lo que ocurrió durante su infancia, nunca una serie se ha atrevido a entregar la principal trama romántica a la némesis de nuestro protagonista y todo ello ayudado de la maravillosa interpretación de Vincent D'Onofrio que pasa del tartamudeo dubitativo a la ira incontrolada con solo un gesto de su cara, a partir de ahora sera imposible imaginarnos otro Kingpin que no sea él.

Daredevil es el comienzo del nuevo plan de Marvel y Netflix para formar un universo televisivo con otras tres series (Jessica Jones, Luke Cage y Iron Fist) que acabarán confluyendo en The Defenders y visto lo logrado hasta ahora solo podemos estar expectantes para ver si consiguen igualar el alto nivel conseguido (difícil lo tienen) con el Diablo de Hell's Kitchen.

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